EL ÚLTIMO HOMBRE

El 16 de Octubre del año 2000, en el desaparecido pabellón Raimundo Saporta, el Real Madrid de Sergio Scariolo recibía a un Olympiacos liderado por Dino Radja y David Rivers. El partido, concluido con victoria local por 75-73, pasará a la historia por haber inaugurado la era moderna de la máxima competición continental de clubes, la Euroliga de la ULEB. En aquella ya lejana primera edición euroliguera nuestro país contaba, como ha venido siendo habitual, con cuatro representantes: el citado Real Madrid, Barcelona, Baskonia (por aquel entonces bajo la denominación de Tau Vitoria) y un Estudiantes que por aquel entonces vivía momentos de esplendor gracias a la sabia dirección de Pepu Hernández y a jugadores como Azofra, Jiménez, Alfonso Reyes, y su joven hermano Felipe.

Tres días después de aquel partido inaugural, el 19 de Octubre, el Estudiantes debutaba en la competición recibiendo al Peristeri en el Palacio de Los Deportes de la comunidad madrileña. Felipe Reyes contaba con 20 años de edad y ya había sido campeón del mundo en categoría junior un año antes. La confianza en él era tal que pese a su juventud era habitual verle salir de titular, como sucedió en aquel su primer partido de Euroliga, en el que jugó 16 minutos dejando 3 puntos y 2 rebotes en la derrota de su equipo por 86 a 91 ante el Peristeri griego.

18 años después, repetimos, 18 años después, Felipe vuelve a jugar una nueva edición de la máxima competición continental. Ayer volvía a saltar a la cancha del Palacio de Los Deportes, mismo escenario donde debutó, para participar en la brutal exhibición de un Real Madrid absolutamente demoledor en su estreno europeo. 13 minutos con 50 segundos en otra demostración de saber aprovechar cada minuto en la pista, anotando 9 puntos sin fallo en el tiro.

Muchas cosas han pasado durante estos 18 años de baloncesto al más alto nivel para un jugador que si las lesiones le respetan se convertirá esta temporada en el hombre que más partidos de Euroliga haya disputado en la historia. Y es que con la retirada (forzada) de su gran amigo Juan Carlos Navarro, y el Brose Bamberg de Nikos Zisis ausente en esta edición, Felipe se convierte en una anécdota viviente que acentúa su rasgo de leyenda. Y es que hablamos del único jugador de los que disputaron aquella primera edición tras el verano del 2000 que disputa esta nueva edición euroliguera. El máximo reboteador histórico del torneo, quien ha levantado dos títulos como capitán del Real Madrid y ha disputado seis finales a cuatro, puede decir aquello del personaje de la célebre novela de Richard Matheson, “Soy leyenda”, tantas veces llevada a la gran pantalla y posiblemente con mayor tino en la versión setentera de Boris Sagal interpretada por un Charlton Heston icónico en el cine de ciencia-ficción por aquellos años, “The Omega Man”, titulada en España bajo el título de “El último hombre… vivo”.

Felipe Reyes, primer y último hombre, 18 años de historia del baloncesto europeo.