lunes, 22 de julio de 2019

ESPAÑA HACE PLATA EN EL REINO DE AVDIJA



En el nombre del padre.







Continúa la clásica recolección de medallas veraniega con la que la FEB año tras año engrandece las vitrinas de nuestro baloncesto. En esta ocasión se trata de una categoría en la que los éxitos nos son tan afines como los U20, aunque desde 2016 (y hay que recordar que a partir de 2004 este torneo se celebra todos los años), cuando fuimos campeones en Helsinki con Marc García como MVP, no habíamos vuelto a subirnos al podio, por lo que hay que darle a esta plata el valor que sin duda merece después de caer ante unos anfitriones que revalidan título (primera selección en conseguirlo desde Serbia en los años 2007 y 2008) liderados por un prodigioso base-escolta-alero de 18 años llamado Deni Avdija a quien los buenos aficionados ya conocerán porque a pesar de su edad es una de las perlas del actual Maccabi Tel Aviv y en Euroliga ya se le ha podido ver rascando minutos de cierta importancia (ante Baskonia llegó a los 10 minutos en pista en el partido disputado en Enero de este año en el Buesa Arena), y cuyo nombre a los aficionados más veteranos no les resultará ajeno.  


En efecto, Deni tiene parentesco con el mítico Zufer Avdija, una institución en el Estrella Roja de los 80 (aquel Estrella Roja de Zoran Radovic, Slobodan Nikolic o el desgraciado Bojan Jankovic) que posteriormente emigraría a Israel donde acabaría su carrera como jugador y donde nacería su hijo Deni, quien por tanto posee la doble nacionalidad serbio-israelí, pero para suerte del país hebreo ha decidido jugar para Israel, donde todo apunta que será en un futuro a medio plazo el próximo líder de la selección absoluta. Sus medias en el Europeo U20 son incontestables: 18.4 puntos, 8.3 rebotes, 5.3 asistencias, 2.1 robos y 2.4 tapones por encuentro. Medias de jugador total que le han valido para ser elegido MVP del campeonato. Sorprendente metodismo, ha sido el quinto mejor jugador en todos los apartados estadísticos que acabamos de mencionar excepto en… ¡tapones!, donde ha sido el segundo mejor taponador. Dato impresionante que habla de la voracidad de su juego. Se le perdonan sus carencias en el tiro (flojo 12 de 42 en triples, y peor todavía su 27 de 45 en tiros libres)


Ha sido Israel la gran dominadora del campeonato pese a debutar con derrota ante Serbia. A partir de ahí no dieron opción a sus rivales en los seis partidos siguientes para acabar colgándose el oro. Un balance similar al de España, que también ha ganado seis partidos y sólo ha perdido uno, precisamente el de la final. Han hecho un buen torneo los chicos de Joaquín Prado, ganando con mucha solvencia la mayoría de los partidos, aunque sufriendo lo indecible ante Turquía en cuartos de final. De hecho el alero Mustafa tuvo en sus manos llevar el partido a la prórroga pero erró su segundo tiro libre en la última acción turca del partido y España pasó a semifinales. Carlos Alocén y Sergi Martínez han sido los líderes del combinado nacional y han sido incluídos en el mejor quinteto del torneo junto a, por supuesto Avdija, el compatriota de éste Madar, y el alemán Herkenhoff, quien llevó al combinado germano a colgarse el bronce.  




viernes, 19 de julio de 2019

LA MEJOR GENERACIÓN, EL MEJOR TÉCNICO









De vuelta de vacaciones toca ponernos al día. Nos vemos absolutamente desbordados por todo lo que está sucediendo en el planeta baloncestístico en las últimas semanas, con traspasos y fichajes bomba a ambos lados del Atlántico. Pero que mejor que comenzar con una excelente noticia, con otro gran hito del baloncesto español como es el de ver a nuestra selección femenina senior colgarse de nuevo la medalla de oro que las acredita como campeonas continentales por cuarta vez en la historia y segunda de manera consecutiva, cosa que nadie había hecho desde el caso aparte de la URSS, absoluta dominadora en Europa ganando nada menos que 20 títulos seguidos entre 1960 y 1991. Precisamente fue España quien en 1993 rompía la insoportable dictadura soviética con nuestro primer oro, una vez que la Unión Soviética ya se había disgregado y Rusia por su parte realizó un campeonato bastante discreto en aquella primera comparecencia. A las órdenes de Manuel Coloma jugadoras como Marina Ferragut, Elizabeth Cebrián, Blanca Ares, o Margarita “Wonny” Geuer (madre de los hermanos Hernángomez) conseguían el primer gran hito del baloncesto femenino español. Era sólo el principio, y de hecho después de la citada Unión Soviética ningún país ha conseguido más campeonatos europeos que el nuestro. 


Las chicas de Mondelo han vuelto a rozar la perfección realizando un torneo impecable y finalizando invictas. Seis partidos resueltos con seis victorias. Sólo Letonia en la primera fase y las anfitrionas serbias en semifinales logran poner en aprietos a nuestro combinado. Para el recuerdo quedan las exhibiciones de octavos ante Rusia y sobre todo una final sin historia en la que pasamos por encima de Francia, de nuevo subcampeona y un peldaño por debajo de las nuestras, como sucediera en 2017 en Chequia. Y todo ello además sin poder contar con la presencia de una de nuestras grandes estrellas (y precisamente MVP en 2017), la alero Alba Torrens, lesionada en la rodilla desde antes del comienzo del verano. Su relevo lo ha tomado una enorme Astou Ndour. La pívot de origen senegalés ha promediado 14.8 puntos y 8.2 rebotes que la confirman como la jugadora más valiosa del reciente campeonato. 


Que nos encontramos ante la mejor generación de jugadoras de la historia del baloncesto español es una obviedad, tanto como que no puede haber mejor técnico para este grupo que un Lucas Mondelo al que la categoría de mito de los banquillos se le queda pequeña. Lo ha ganado absolutamente todo como entrenador de clubes, pero es que en la selección española su presencia se traduce en nada menos que diez medallas (siete con la absoluta, tres con juveniles) Desde que se hizo cargo del banquillo del equipo nacional senior, en el Eurobasket 2013, no ha dejado de subirse al podio ningún verano. Siete años consecutivos. Una locura y un palmarés que le sitúa como el mejor técnico de la Federación Española de Baloncesto en cualquiera de las categorías. 


Ahora que la impresionante generación de los Juniors de Oro parece tocar a su fin (el Mundial de China será el primer torneo sin ningún jugador de aquel grupo, desde que en los Juegos Olímpicos de Sydney de 2000 Javier Imbroda llevase a Juan Carlos Navarro y Raúl López, inaugurando un siglo inolvidable para nuestro deporte) queda seguir disfrutando de una generación femenina a la que vista la edad de algunos de sus pilares (Ndour, Casas, Xargay, Torrens…) le queda cuerda para rato (y seguimos esperando a Angela Salvadores), como cuerda la queda, qué duda cabe, al mejor entrenador de la mejor generación, Lucas Mondelo.