Analizamos los dos primeros
partidos de preparación de la selección española en su camino hacia el
Eurobasket de Eslovenia. Dos encuentros bien diferenciados pero que dejan ya
suficientes pistas sobre la idea de Orenga para con el equipo, la cual no
difiere mucho de lo que anunciamos en este blog hace ya unas entradas.
La línea exterior tendrá un
papel predominante en el juego español, recurriendo a un descarado “small ball”
con constante presencia de dos bases en pista y Rudy (tal y como sucedía con
Scariolo) jugando de tres. Llull también será en ocasiones utilizado en tal
posición en detrimento de Mumbrú (quien alternará entre tres y cuatro) y San
Emeterio (con papel, en principio, poco relevante) Dudo que lleguemos a ver en ningún
momento a Claver de tres (tampoco estaría mal probarlo) Marc Gasol asemeja un oasis
dentro de un juego interior aún poco trabajado y donde se concentran el mayor
número de dudas. La intención de jugar a ritmo alto también parece clara, para
lo cual es necesaria la suficiente fortaleza cerrando nuestro rebote que
permita salir al contragolpe, lo cual contra una muy bien trabajada Polonia no
sucedió. No andamos tampoco sobrados de tiro exterior, pese a lo visto frente a
la débil Alemania. Adolecemos, sin Navarro, de la figura de un “killer”
definitivo. Calderón en el primer partido y Llull en el segundo fueron los
ejecutores más descarados. Seguimos esperando a Rudy en esa faceta (su trabajo
en defensa, rebote, y una serie de intangibles, está fuera de toda duda) El
nuevo base de los Mavericks verá mucho aro y se verá relegado a jugar de
escolta en muchas ocasiones, cediendo la batuta a un Ricky que ya ha sido capaz
de repartir 16 asistencias en los 39 minutos que ha dispuesto en cancha en ambos
partidos, números que le confirman como nuestro director más fiable (y
recordemos que sigue siendo el jugador más joven de la selección), de hecho la
conexión Ricky-Marc puede ser nuestro mejor distintivo de cara a Eslovenia. Los
dos sergios, Rodríguez y Llull, confirman el buen momento con el que terminaron
la temporada pasada. El tinerfeño, llegado como tercer base, será mucho más
importante que lo que pudiera parecer con ese rol. En definitiva, mucho que
trabajar sobre todo por dentro.
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| La mano de Ricky ya se nota en España |
Así pues la jerarquía en el
grupo de un tranquilo Orenga puede diferenciarse de la siguiente manera:
-Marc Gasol. Piedra angular
del bloque. Si no sufre problemas físicos y no se carga en exceso de faltas
personales, será el jugador más utilizado por Orenga.
-Calderón, Ricky, Sergio
Rodríguez, Llull y Rudy. Los cinco “bajitos”. Los exteriores puros del equipo. Entre
ellos cinco se disputarán casi todos los minutos de las tres posiciones
exteriores. Todos jugarán y jugarán mucho, por encima de los 20 minutos por
partidos.
-Claver y Aguilar. Los dos
“cuatros” que pretende utilizar Orenga, ambos comparten la característica de
ser power-forwards muy abiertos. Debería ser la hora del jugador de Portland,
pero la buena prestación en el tiro de Aguilar, nuestro hombre alto con mejor
mano desde Garbajosa, hace que gane muchos enteros.
-Xavi Rey, Gabriel, Mumbrú y
San Emeterio. Cuatro jugadores que dispondrán de minutos en base a la
dificultad e importancia de los partidos. En los momentos claves serán
residuales, sobre todo en el caso de Gabriel y San Emeterio. Mumbrú aprovechará
su veteranía y polivalencia, y Xavi Rey parece el interior con mayor capacidad
para jugar por dentro tras Gasol. Eso debiera concederles algunas
oportunidades.
El camino ya ha empezado. Queda
mucho por trabajar y muchos ajustes que realizar.
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| Queda mucho por andar. |
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