Kucharski, en el centro de la fotografía en su etapa de entrenador del Barça en los 70 |
Ha fallecido Eduardo Kucharski a los 89
años de edad. Uno de los grandes pioneros de nuestra canasta, quizás
incluso el gran pionero por antonomasia, la primera gran estrella.
Genio precoz, a los 15 años ya jugaba
en el primer equipo del Laietá de Barcelona, histórico club que
tiene el honor de ser el primero fundado en nuestro país dedicado al
deporte de la canasta. A los 17, siendo ya uno de los líderes del
equipo, ganaba su primer título de campeón nacional. No sólo eso,
la canasta de la victoria en la final contra el Barcelona llevaba su
firma. Algunas crónicas hablan que fue desde el medio campo, aunque
el propio protagonista reconocía que no fuera de tan lejos (hablamos
del año 1942, con lo que difícilmente quedaron recogidos documentos
sobre la hazaña) Siendo todavía adolescente, era normal verle ser
el máximo anotador de su equipo. La selección, como no podía ser
de otro modo, pronto reclamó sus servicios. Debutó a los 17 años
en Toulouse frente a una selección de la Francia ocupada por los
nazis. Defendió nuestra camiseta hasta los 33 años, en un total de
50 partidos (hay que comprender que el ritmo de competición durante
aquellos años era muy inferior y no se jugaban tantos partidos como
hoy día) Llega a coincidir a finales de los 50, antes de su retirada
del combinado nacional, con quien sería la siguiente gran estrella
del baloncesto español, otro mito como fue el alero leonés Emiliano
Rodríguez. Su mayor éxito con la camiseta nacional fue el oro en
los Juegos del Mediterráneo de 1955 disputados en Barcelona.
Como jugador de club, su carrera
deportiva se fraguó entre el Laietá, el Barcelona, Joventut y
Aismalíbar, siempre en su Cataluña natal. El Aismalibar de Montcada
era un club modesto que jugaba en tercera división a su llegada. Con
él llegan a primera y están a punto de ser campeones de España,
perdiendo en la final en la prórroga contra el Real Madrid, en un
polémico final en el que se acusó al delegado madridista de haber
retrasado las manecillas del reloj 20 segundos cuando con el tiempo
reglamentario la victoria correspondía a los catalanes. Sea como
fuere aquel Aismalíbar se recuerda como uno de los equipos más
excitantes de aquella época, con mucha libertad en ataque para los
jugadores y predilección por el contraataque. Kucharski coincidiría
allí con otro de los grandes mitos de nuestro basket como fue el
magnífico reboteador Alfonso Martínez.
En aquel club donde nuestro hombre iba
a terminar sus días de jugador, comenzaba también, compaginando sus
últimos años de carrera de corto, su andadura como técnico. Como
entrenador también fue legendario... llevó al Joventut de Badalona
a conquistar su primer título de liga (1967), fue el primer técnico
español en entrenar en el extranjero (Virtus Bolonia), dirigió a la
selección española entre 1959 y 1960...
Este es un pequeñísimo esbozo de
quien fuera la primera gran leyenda de nuestro baloncesto, en unos
años tan distintos a los actuales que todo en torno a Kucharski
resulta pintoresco. En su época de jugador del Barcelona por las
mañanas competía al tenis en el Campeonato de Catalunya de tercera
categoría, por otro lado afirmaba no cuidarse nada y comer y beber
lo que le apeteciera (y las pocas fotos que hay de la época dan fe
de ello) En definitiva, un baloncesto de otra época.
Descanse en paz, y gracias por comenzar
a mostrarnos el camino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario